SpaceX ha realizado pruebas de incendio estáticas para ambas etapas de su sistema de lanzamiento de la nave espacial como preparativos para el próximo progreso de la prueba de vuelo integrado. El refuerzo súper pesado y la segunda etapa de Starship fueron probadas en las instalaciones de Starbase de la compañía en Texas. El fuego estático de duración completa del refuerzo súper pesado involucró los 33 motores Raptor, simulando las condiciones esperadas durante el lanzamiento. La segunda etapa experimentó su propia prueba de motor, con condiciones de empuje variables para replicar escenarios de vuelo. Los próximos pasos implicarán apilar las dos etapas en previsión de la próxima misión.
Pruebas de incendio estático súper pesados y naves espaciales
Según un funcionario anuncioEl refuerzo súper pesado fue sometido a una prueba de incendio estático de duración completa, validando su rendimiento antes del próximo intento de lanzamiento. La prueba, realizada en la instalación de SpaceX, se confirmó a través de imágenes y actualizaciones compartidas por la compañía. Días después, la etapa superior de Starship se sometió a una prueba de motor separada cerca del sitio de lanzamiento, con ingenieros que evalúan el rendimiento del motor en diferentes condiciones de empuje. Los resultados contribuirán a refinar el sistema de propulsión del vehículo para el próximo vuelo de prueba.
Próximo lanzamiento y consideraciones regulatorias
Como reportado Por House.com, indique que la próxima prueba de vuelo integrada, conocida como IFT-8, podría tener lugar a fines de febrero. Sin embargo, la aprobación ultimate de la Administración Federal de Aviación (FAA) sigue siendo un requisito clave antes de confirmar una fecha de lanzamiento. SpaceX tiene como objetivo realizar múltiples lanzamientos de naves espaciales durante todo el año, alineándose con sus planes más amplios para avanzar en la tecnología de cohetes reutilizables.
El rendimiento de la nave espacial en vuelos anteriores
El último vuelo de prueba, IFT-7, se lanzó en enero de 2025. Mientras que el refuerzo súper pesado fue capturado con éxito utilizando los brazos robóticos de la torre de lanzamiento, la comunicación con la segunda etapa de Starship se perdió en la mitad del vuelo. Los observadores informaron que los escombros cayeron sobre el Caribe, lo que indica una posible ruptura en el vuelo. Se espera que los ingenieros implementen mejoras operativas y de diseño para la próxima misión, con el objetivo de una mejor estabilidad de vuelo y descenso controlado de ambas etapas.
El papel de Starship en las futuras misiones
SpaceX continúa refinando el sistema de nave de naves para uso operativo. El vehículo está destinado a apoyar varias misiones, incluido el programa Artemis de la NASA, cuyo objetivo es devolver a los astronautas a la superficie lunar. El Lander de Starship está planeado para su uso en Artemis 3, actualmente programado para 2027. Serán necesarios vuelos de prueba adicionales para validar las capacidades del vehículo antes de que pueda implementarse para la luz espacial humana y otras misiones comerciales.